
Alastrué.
La misma fachada que adorna la portada del libro » La Montaña olvidada» de Arturo González.
La Peña Balluals es un mirador de primera categoría situada en el este del curso del Alcanadre entre Bibán y Bara – un paraje paradisíaco. Sin embargo, los caminos hacia su cima pasan por terrenos muy secos y están medio borrados por el incansable crecimiento del Erizón y de otras plantas (que pinchan). Por esta razón presento en esta entrada una circular que rodea esta peña, pasando de despoblado a despoblado, sin alejarse demasiado de los cursos del agua.
Como la cima sigue siendo llamativa y nos quedaríamos con las ganas, si no la hubiéramos coronado, presento también una variante, suave y fácil, que nos permite ascender a este vértice geológico, incluso con la presencia de nieve o hielo en invierno. El único handicap sigue siendo el terreno seco, repleto de maleza.
En la ruta de hoy visitaremos también el bonito pueblo abandonado de Alastrué, él cual ha sido protagonista en la entrada «Alastrué y las raices del Mascún«. Aquella descripción relata el acceso desde Las Bellostas, desde el este. Esta vez nos acercamos desde Bara, desde el oeste. Es una variante más salvaje, más directa y igual de entretenida.
Además veremos Miz, un pequeña aldea de dos casas abandonadas que se encuentra en un entorno maravilloso y Bibán que fue mencionado ya en un parágrafo de la entrada sobre «despoblados del joven Alcanadre«. Por cierto, de este río veremos como objetivo principal la Badina Estañero que se encuentra cerca de Bara.
Con una buena ración de agua y el almuerzo preparados en la mochila y la corea del perro en la mano nos dirigimos a Bara para explorar las faldas del Balluals.
Bara – Miz: 1h15.
Miz – Alasrué: 1h30.
Alstrué – Bibán: 45min.
Biban – Miz: 1h15.
Miz – Bara: 45min.
Opcional:
Ascensión a la Peña Balluals: 30min.
_______________
Total: 6h15, jornada completa.
Aparcamiento:
Aparcamos en Bara.
Acceso:
Nos acercamos a la iglesia de Bara.
Al principio avanzamos por el recorrido S 12 que parte de la iglesia y le seguimos hasta la Badina Estañero. Allí un cartel marca el desvío a Miz. Cruzamos el Alcanadre por una pasarela a la que faltan las ultimas piedras (con un brinco lo superaremos) y seguimos remontando el río por la otra orilla. Cuando estemos a la altura del molino que se encuentra en el otro lado del río la senda finalmente deja el Alcanadre y empieza a subir. Se arrima al Barranco de Miz, lo cruza y continua por la vertiente norte del vallecito derecho hasta Miz.
Miz
La pequeña aldea está ubicada en una explanada soleada de la cabecera del Barranco de Miz.
El núcleo lo forman sólo dos casas, mientras que la iglesia está un poco separada de ellas. Además hay unas cuantas bordas rodeando este conjunto. En el oeste se encuentra la chopera que salta a la vista desde lejos y revela la ubicación de este escondido asentamiento.
50m más allá de la iglesia se encuentra la fuente y a lado de ella un cruce de caminos con carteles indicativos.
Seguimos por la senda que lleva a Alastrué, como indicado. Esta senda abandona la cabecera del Barranco de Miz por un modesto collado y sigue travesando la falda de la Peña Balluals en dirección noreste hasta topar con el Barranco San Lázaro que forma marmitas, pequeñas pero bonitas,en esta zona y debería mantener un mínimo de caudal durante todo el año. Esta senda resultará muy agradable y bonito. Primero pasaremos por terreno seco, repleto de covachos y cuevas, dejaremos una bonita borda a nuestra derecha y traspasaremos finalmente un caxical, sano y viejo.

En el camino a Alastrué.
La foto tomó desde una posible ascensión a la cima de la Peña Balluals, fuera de la senda. Esta pasa cerca de la borda.
Desde el barranco sólo resta una pequeña subida para llegar a la explanada que ubica el pueblo de Alastrué.
Alastrué
El pueblo y su entorno son una maravilla. La aldea se encuentra entre los pastos de una loma que divide dos barrancos antes de su desembocadura. En el camino de la subida hemos conocido ya al barranco de la derecha y sus acantilados. El otro, el Barranco Foroñón, podemos visitar también, aunque la ruta prevista no se acerca a él. Hay una descripción en la entrada «Alastrué y las raíces del Mascún«.
La iglesia está en la zona más expuesta hacia los acantilados que caen a la desembocadura, y es justo ella que se ha conservado mejor – una visita es imprescindible. Las casas y bordas debemos visitar también y buscar detalles de la arquitectura popular. Podemos aprovechar el ambiente encantador para descansar, ya que hemos llegado a uno de los objetivos principales de la excursión.
Para seguir con la ruta de hoy buscamos una vieja pista forestal que lleva a Bibán y parte en el norte del pueblo. Este tramo será la parte menos atractiva de la ruta triangular, pero también el flanco más corto.
En un suave collado cruzamos una valla y este es justo el punto donde podemos optar para hacer una visita a la Peña Balluals.
Peña Balluals (opcional)
Las buenas vistas nos proporcionan suficientes motivaciones para cargarnos con este ascenso adicional. Según algunas mapas hay tres maneras de hacer cima. La última propongo en esta descripción.
1. Desde el camino Miz – Alastrué:
Esta variante es la que está más presente en la literatura (por ejemplo Oscar Ballarín la ofrece en su guía “Sierra de Guara – Excursiones, Ascensiones y Travesías”).
Con el paso del tiempo la erosión ha puesto inconvenientes a esta opción. Muchos de los hitos se han perdido y algunas de las piedras que fueron colocadas como peldaños para salvar resaltes de rocas se han desplazado. Dichas deficiencia convierten esta ruta en una marcha libre por terreno complicado.
2. Desde el camino Bibán – Miz:
No he encontrado este camino bajando de la cima, ni he visto su inicio desde abajo. No se, si sigue existiendo hoy en día.
3. Desde el camino Alastrué – Bibán:
En el collado mencionado anteriormente cruzamos la valla, pero en vez de seguir por el camino a Bibán subimos a lado de dicha alambrada. En breve se forma una tímida senda que facilita el avance entre la maleza. Puede que se trata del camino de mantenimiento, ya que se arrima siempre a la valla. De esta forma coronamos una primera precima. En esta dejamos la valla y seguimos por la suave cresta hacia Balluals. Sigue habiendo una estrecha senda entre matojos de Erizón y sigue siendo visible en la mayor parte de su trayecto. Sin embargo, tenemos que prestar mucha atención en no perder la trocha entre la mar de Erizón. Pronto veremos el vértice geológico que marca la cumbre. La senda sigue por la crestería evitando un pequeño barranco que baja a nuestra izquierda y encuentra finalmente la plataforma cimera.
Volvemos por el mismo camino. Tenemos que prestar atención en no pasar de largo de la valla que encontraremos de nuevo en la precima.
Marchando de nuevo por el camino a Bibán llegaremos en breve a este despoblado.
Bibán
Por donde entramos en el pueblo veremos una pequeña balsa a mano derecha. Si el agua está putrefacto debemos tener en cuenta que hay una fuente de agua fresca en la salida del pueblo.
De los gigantescos olmos sólo quedan los troncos y las ramas en el suelo donde se están desintegrando.
La iglesia, adosada a otro edificio, se encuentra en el barrio alto. Ya que es una construcción ordinaria, resulta difícil averiguar de cual de las ruina se trata.
En el barrio bajo tenemos que buscar un cartel que indica el camino a Miz. Este baja a lado de las ultimas bordas y se acerca al Barranco de Balluals. Un cartel indica la ubicación de una buena fuente en la orilla.
Seguimos por la senda que traspasa un bosque, viejo y bonito, en suave ascenso. Después de una larga y agradable marcha entre árboles, pasaremos a la vertiente sur de la falda de la Peña Balluals donde se abren de nuevo buenas vistas al entorno de Bara. Sólo resta bajar de zingla en zingla hasta llegar finalmente a Miz y cerrar de esta manera la ruta circular.
Retorno:
Volvemos por la misma senda de Miz a Bara.